¡Atención, navegantes de las redes sociales! Meta, la empresa madre de Facebook, Instagram y WhatsApp, ha anunciado un cambio que dará mucho que hablar. A partir del 16 de diciembre de 2025, la compañÃa comenzará a utilizar las interacciones que tengamos con su inteligencia artificial (IA) para personalizar aún más los anuncios y el contenido que vemos en sus plataformas. SÃ, has leÃdo bien: tus charlas con Meta AI pronto influirán en los Reels que te aparecen o en la publicidad de esas zapatillas que justo estabas pensando en comprar.
La compañÃa empezará a notificar a los usuarios sobre esta actualización a través de correos electrónicos y notificaciones dentro de las propias aplicaciones a partir del 7 de octubre. La idea, según Meta, es hacer la experiencia más relevante y útil para los más de mil millones de personas que ya usan su IA cada mes. Pero, ¿qué significa esto realmente para nosotros, los usuarios? Vamos a desgranarlo.
¿Cómo funcionará este nuevo sistema?
La lógica es bastante sencilla y, en realidad, una extensión de lo que Meta ya hace. Actualmente, la plataforma personaliza nuestro feed basándose en nuestras actividades: los likes que damos, las cuentas que seguimos, los vÃdeos que compartimos o los comentarios que dejamos. Ahora, a toda esa información se sumará una nueva capa de datos: nuestras conversaciones con Meta AI.
Imagina que estás planeando un viaje y le pides a la IA de Meta ideas sobre rutas de senderismo en los Alpes. Con este nuevo sistema, no serÃa de extrañar que poco después empieces a ver:
- Anuncios de botas de montaña o equipamiento de acampada.
- Reels de paisajes montañosos espectaculares.
- Sugerencias para unirte a grupos de Facebook sobre senderismo.
- Publicaciones de tus amigos que hayan estado en esa zona.
Básicamente, cualquier conversación, ya sea por texto o por voz (incluso a través de las gafas Ray-Ban Meta), se convertirá en una señal para que el algoritmo entienda mejor tus intereses en tiempo real y te ofrezca contenido y publicidad que considera más relevante para ti.
¿Qué pasa con la privacidad y los temas sensibles?
Esta es, sin duda, la pregunta del millón. Meta ha querido adelantarse a las preocupaciones y ha asegurado que las conversaciones sobre temas sensibles no se utilizarán para la segmentación de anuncios. Esto incluye explÃcitamente categorÃas como:
- Opiniones religiosas o filosóficas.
- Orientación sexual.
- Opiniones polÃticas.
- Salud.
- Origen racial o étnico.
- Afiliación sindical.
Aunque es un alivio saber que estos temas quedan fuera, la medida sigue planteando un debate importante sobre la transparencia y el uso de nuestros datos personales para fines comerciales.
¿Puedo negarme? El control que nos queda
Aquà viene una de las claves del asunto: no habrá una opción para desactivar por completo esta nueva forma de recopilación de datos si utilizas Meta AI. Si interactúas con la IA, tus datos se usarán para este fin. La única manera de evitarlo por completo es, simplemente, no utilizar las funciones de inteligencia artificial de Meta.
Sin embargo, la compañÃa recuerda que los usuarios seguirán teniendo control sobre la publicidad que ven a través de las herramientas existentes como las "Preferencias de anuncios" y otros controles del feed. Desde ahÃ, podrás seguir ajustando los temas de los anuncios que te interesan o indicando qué contenido no quieres ver.
¿Afecta a todo el mundo por igual?
Inicialmente, no. Este cambio se implementará en Estados Unidos y "la mayorÃa de las regiones". Sin embargo, debido a las estrictas regulaciones de protección de datos como el RGPD, la Unión Europea y el Reino Unido no estarán incluidos en el lanzamiento inicial del 16 de diciembre. Meta ha indicado que la implementación en estas regiones se hará en otras fechas, probablemente tras un análisis más exhaustivo para cumplir con la legislación local.
En definitiva, Meta da un paso más para integrar la inteligencia artificial en el núcleo de su negocio publicitario. Para los anunciantes, esto supone una fuente de datos increÃblemente rica para afinar sus campañas. Para nosotros, los usuarios, representa una personalización aún más profunda de nuestra experiencia online, con la consiguiente reflexión sobre hasta qué punto nos sentimos cómodos compartiendo nuestras conversaciones para recibir anuncios más "relevantes". La transparencia y el control sobre nuestros datos serán, más que nunca, fundamentales en esta nueva era de la IA.