¡Atención, navegantes de la red profesional! Se avecina un cambio importante en LinkedIn que ha encendido las alarmas de muchos en cuanto a la privacidad. A partir del 3 de noviembre de 2025, la plataforma propiedad de Microsoft empezará a utilizar los datos de una parte de sus usuarios para alimentar y entrenar sus sistemas de inteligencia artificial (IA). Lo más llamativo de este anuncio es que esta opción vendrá activada por defecto. Esto significa que, si no haces nada, estarás dando tu consentimiento tácito. Pero que no cunda el pánico, porque en este artículo te vamos a contar con pelos y señales qué implica todo esto y, lo más importante, cómo puedes desactivar esta opción si no te convence la idea.
¿Qué datos usará LinkedIn exactamente?
Según el comunicado oficial de la compañía, los datos que se utilizarán para este fin incluyen detalles del perfil, como tu nombre, experiencia laboral, formación, ubicación y aptitudes, así como todo el contenido público que hayas compartido. Esto abarca tus publicaciones, artículos, comentarios y encuestas. La buena noticia es que tus mensajes privados están a salvo y no se incluirán en este proceso de entrenamiento de la IA. El objetivo declarado de LinkedIn es "optimizar la experiencia y ayudar a nuestros usuarios a descubrir nuevas oportunidades", mejorando así sus herramientas de IA generativa.
Esta medida afectará a los usuarios de las siguientes regiones:
- Europa (Unión Europea y Espacio Económico Europeo)
- Reino Unido
- Suiza
- Canadá
- Hong Kong
Curiosamente, esta expansión se produce después de que en 2024 se implementara una política similar en Estados Unidos y otros mercados. Además, la compañía ha aclarado que los perfiles de usuarios menores de 18 años quedarán automáticamente excluidos de esta recopilación de datos para la IA.
El debate está servido: innovación vs. privacidad
La decisión de LinkedIn no ha estado exenta de polémica. Se enmarca en una tendencia creciente donde las grandes plataformas tecnológicas utilizan el ingente volumen de contenido generado por sus usuarios para perfeccionar sus algoritmos. Microsoft, la casa matriz de LinkedIn, ha realizado inversiones millonarias en OpenAI (los creadores de ChatGPT), lo que evidencia su fuerte apuesta por la inteligencia artificial.
Desde el punto de vista legal, LinkedIn se ampara en la base jurídica del "interés legítimo" contemplada en el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) europeo. Sin embargo, diversas autoridades de protección de datos, como la holandesa (AP), han expresado su preocupación y han recomendado a los usuarios que desactiven la opción. El principal argumento de los críticos es que un cambio de esta magnitud debería requerir un consentimiento explícito ("opt-in") en lugar de un modelo de exclusión voluntaria ("opt-out"), que consideran menos transparente y que carga la responsabilidad en el usuario.
Paso a paso: Cómo impedir que LinkedIn use tus datos para la IA
Si has decidido que prefieres mantener tus datos al margen de los algoritmos de IA de LinkedIn, el proceso para desactivar la opción es bastante sencillo. Puedes hacerlo en cualquier momento, tanto antes como después de la fecha límite del 3 de noviembre. Aquí te dejamos las instrucciones:
- Inicia sesión en tu cuenta de LinkedIn.
- Haz clic en tu foto de perfil (generalmente en la esquina superior derecha) y selecciona "Configuración y privacidad" en el menú desplegable.
- En el menú de la izquierda, busca y haz clic en la sección "Privacidad de los datos".
- Dentro de esta sección, busca un apartado llamado "Cómo utiliza LinkedIn tus datos". Ahí encontrarás la opción "Datos para mejorar la IA generativa" o un texto similar.
- Entra en esa opción y simplemente desactiva el interruptor. Por defecto estará en "Sí" o activado; asegúrate de ponerlo en "No".
¡Y listo! Con estos sencillos pasos, habrás impedido que LinkedIn utilice tus datos públicos para futuros entrenamientos de sus modelos de IA. Es importante señalar que esta acción previene el uso futuro de tus datos, pero la información recopilada antes de que cambiaras la configuración podría permanecer en el sistema. Para solicitar la eliminación de datos anteriores, algunos expertos sugieren rellenar un formulario de objeción al procesamiento de datos que ofrece la plataforma.
Mi opinión como periodista
La encrucijada entre el avance tecnológico y el derecho fundamental a la privacidad es, sin duda, uno de los grandes debates de nuestra era digital. La decisión de LinkedIn es un claro ejemplo de ello. Si bien es innegable que el uso de datos reales y masivos mejora la eficacia de las herramientas de inteligencia artificial, lo que a su vez podría beneficiarnos con mejores recomendaciones de empleo o contenido más relevante, el método del "consentimiento por defecto" me genera serias dudas. En un mundo ideal, las empresas deberían ser proactivas a la hora de solicitar nuestro permiso de forma clara y directa, no esperar que naveguemos por menús de configuración para proteger nuestra información. Mi recomendación es simple: infórmate, reflexiona sobre qué nivel de privacidad deseas y actúa en consecuencia. Al final del día, tus datos son tuyos y la decisión de compartirlos, también.