¡Hola, amantes de la tecnologÃa! La cosa se está poniendo más que interesante en el universo de la inteligencia artificial. Si pensabais que la partida se jugaba solo entre Estados Unidos y un par de empresas conocidas, estáis muy equivocados. Desde China llega un jugador que pisa fuerte y tiene un plan muy claro: Baidu, el que muchos llaman el "Google chino", acaba de presentar sus nuevas joyas de la corona, dos chips de IA con los que pretende no solo sobrevivir a las restricciones de exportación de EE.UU., sino también competir de tú a tú con el gigante Nvidia.
La tensión entre las dos superpotencias ha obligado a muchas tecnológicas chinas a ponerse las pilas y buscarse la vida. Lejos de amilanarse, Baidu ha respondido con una estrategia audaz que lleva cocinando desde 2011: desarrollar sus propios semiconductores. Y los frutos de ese esfuerzo se han presentado en su evento anual, el Baidu World 2025, dejando a todos con la boca abierta.
Los nuevos guerreros de silicio: M100 y M300
Baidu no se ha andado con chiquitas y ha presentado dos nuevos procesadores, cada uno con una misión especÃfica en el campo de batalla de la IA. Pertenecen a su familia de chips Kunlun, desarrollada por su unidad independiente Kunlunxin Technology.
- Kunlun M100: Este chip está pensado para la inferencia. ¿Y qué es eso? Pues, para que nos entendamos, es el proceso de usar un modelo de IA ya entrenado para hacer predicciones o responder a nuestras peticiones. Es el cerebro que permite que un chatbot te conteste o que un sistema reconozca una imagen. Se espera que esté disponible a principios de 2026.
- Kunlun M300: Este es el hermano mayor y más musculoso. Es un procesador más versátil y potente, diseñado tanto para el entrenamiento de modelos (la fase de creación y aprendizaje de las IA) como para la inferencia. Está pensado para manejar modelos multimodales gigantescos, de esos que trabajan con billones de parámetros. Para tenerlo entre nosotros habrá que esperar un poco más, hasta principios de 2027.
Con estos lanzamientos, Baidu busca ofrecer una "potencia de computación de IA potente, de bajo coste y controlable" para impulsar la autosuficiencia tecnológica de China. Un objetivo ambicioso, sobre todo si tenemos en cuenta que Nvidia, el actual rey del mambo, alcanzó una capitalización de mercado que duplicaba el PIB de Italia.
Más allá del chip: la estrategia del "supernodo"
Baidu sabe que un solo chip, por muy potente que sea, no gana la guerra. Por eso, su apuesta va mucho más allá. Están invirtiendo fuerte en lo que llaman arquitecturas de "supernodo". La idea es simple pero potentÃsima: conectar cientos o incluso miles de sus procesadores para que trabajen como una única y gigantesca unidad de cálculo.
Ya tienen planes concretos: el sistema Tianchi256, que unirá 256 de sus chips, se lanzará en la primera mitad del próximo año, prometiendo una mejora de rendimiento de más del 50%. Y para la segunda mitad de 2026, llegará el Tianchi512. La meta final, para 2030, es construir un supernodo que pueda soportar "millones" de chips. Otros gigantes chinos como Huawei también están explorando esta vÃa, dejando claro que el desafÃo a Occidente en el campo de la IA es total.
Ernie 5.0: el cerebro se renueva
Y como no solo de hardware vive la IA, Baidu ha aprovechado para presentar la última versión de su modelo de lenguaje, Ernie 5.0. Este modelo, que es la base de su popular chatbot Ernie Bot, ahora es omni-modal. Esto significa que no solo entiende y genera texto, sino que también puede procesar y analizar imágenes, audio y vÃdeo. Con 2,4 billones de parámetros, se pone a la altura de los grandes competidores como OpenAI, Google y Microsoft, demostrando mejoras en comprensión, creatividad y lógica.
Un futuro de autosuficiencia y competencia
Lo que está haciendo Baidu es mucho más que lanzar nuevos productos; es una declaración de intenciones. Ante un panorama geopolÃtico que busca limitar su acceso a la tecnologÃa punta, China está respondiendo con una inversión masiva en su propio ecosistema. El objetivo ya no es solo igualar el rendimiento de los chips occidentales, sino crear una alternativa completamente independiente y funcional. Este movimiento, apoyado por directrices gubernamentales, está forjando un nuevo capÃtulo en la carrera tecnológica global.
Desde mi punto de vista, estamos asistiendo a una reorganización fascinante del poder tecnológico. La estrategia de Baidu, centrada no solo en el chip individual sino en la potencia del clúster y en un ecosistema de software robusto, es increÃblemente inteligente. Aunque el camino para competir con el dominio de Nvidia es largo y complicado, esta apuesta por la autosuficiencia podrÃa, a largo plazo, redefinir el mercado global de la inteligencia artificial. No se trata solo de una batalla de procesadores, sino de una maratón por la innovación y la independencia tecnológica. Y en esta carrera, Baidu acaba de demostrar que tiene el fondo y la estrategia para llegar muy lejos.
